
¿Qué está pasando? ¿Por qué se oye cada vez más la palabra “sostenible”? Recuerdo historias de mis padres, donde me contaban que antes solo tenían un par de zapatos y siempre heredaban la ropa de su hermano mayor o incluso que pasaba por varias generaciones. En Navidad les traían un vestido o unas zapatillas nuevas que les duraban meses y meses. A mi misma me han puesto parches en los pantalones y me han llevado los zapatos al zapatero, cómo se olvidan estas cosas, ¿verdad?
La sociedad ha cambiado y hemos evolucionado muchísimo, es más fácil acceder a la ropa y el calzado, pero ¿lo estamos haciendo bien? Yo no puedo contestar a esa pregunta, solo soy una simple gata.
En nuestra tienda, mis humanos y yo conocemos gente maravillosa todos los días, nos preguntan mucho y se interesan por la procedencia de la ropa; de si está en buenas condiciones, si la hemos lavado y muchas cosas más. Nos encanta hablar con ellas y explicarles que nosotras elegimos cada prenda. Por eso puede haber unas de marca, otras más vintage, de los años 2000 o incluso de la actualidad, pero lo que tienen todas en común es que han sido aprovechadas por otras personas.
La vida de la ropa es muy larga y muchas veces no dejamos que la termine. Nos imponen modas nuevas cada día y nos bombardean con anuncios e imágenes enseñándonos miles de productos. Todos hemos caído alguna vez, esa es la realidad. Esto se traduce en contenedores de ropa, contaminación, trabajo precario… y todo para que podamos estrenar ropa todas las semanas, como si lo que importase o lo que diese valor a las personas es lo que llevan puesto.
Admiramos a cada una de las personas que entra en nuestra tienda y buscan prendas “diferentes”,algo que no encuentran en las demás. Nos encanta escuchar: ¡Ala! ¡Que original! ¡Qué bonito! ¡Qué raro! Esa es la esencia y lo que nos define, no hacemos caso a lo que nos quieren imponer, queremos ser nosotras mismas y que nuestra ropa nos represente así que, sí, nos gusta lo “diferente” y lo “raro”.
Y por eso en mi tienda (porque es mía, mis humanos son simples empleados) no hacemos diferencia entre géneros ni edades. La ropa es ropa, la tela es tela y los colores son colores. Como siempre decimos “Queremos darle una segunda ropa a tu vida”, y para nosotras el día está hecho si conseguimos sacarte una sonrisa.
Firmado: La gata Breva
